Al lado de las banderas tricolores
tres juramentos pongamos:
uno de llorar con lágrima pura,
y otro de odio a los tiranos,
tres juramentos pongamos:
uno de llorar con lágrima pura,
y otro de odio a los tiranos,
y para ti, pequeño país, sea el tercero:
que entre los vivos no lo olvide nadie;
la libertad nació un día señero
cuando en Budapest de sangre se tiñó la calle.
Lajos Tamási
No hay comentarios.:
Publicar un comentario